domingo, 20 de julio de 2014

Nacimiento y organización de la República romana

Tras una penumbra legendaria, que desemboca en la tímida luz del crepúsculo de la historia romana, encontramos la ciudad de Rómulo regida, sucesivamente, por tres reyes que llevan nombre etrusco: Tarquino el Antiguo, Servio Tulio y Tarquino el Soberbio. Con la expulsión del último, a fines del siglo VI a.C., los romanos se liberaron de la dominación etrusca e instauraron la República, que había de durar hasta principios de la segunda mitad del siglo I antes nuestra Era, y engrandecer la ciudad con el vasto dominio mediterráneo, que llamamos Imperio romano.

Republica romana

- El Senado y las nuevas magistraturas en la República romana


El poder de los reyes fue confiado a dos cónsules de elección anual, mientras el Senado, la vieja asamblea de los padres de las gens, que surgió ya durante la monarquía, se hizo omnipotente y aseguró la continuidad de las instituciones republicanas. Con el tiempo, aparecieron otras magistraturas encargadas de determinadas funciones de gobierno: los pretores, de la administración de la justicia; los cuestores, de la gestión de la hacienda pública; los censores, de la formación del censo y la vigilancia de las costumbres de los ciudadanos; los ediles, del aprovisionamiento y policía de la ciudad.

- Los patricios: acceso al Senado, la Asamblea del Pueblo y las magistraturas


En los primeros tiempos de la República, sólo podía formar parte del Senado y de la Asamblea del pueblo, y ocupar las magistraturas una minoría de personas, llamados patricios, que eran miembros de una gens, y constituían exclusivamente el pueblo de Roma, el populus. Fuera de la ciudadanía, de las leyes y de la vida pública de la ciudad, quedaba una masa de población, constituída por la Roma primitiva había dejado en condición de inferioridad.

La República romana fue, pues, en sus comienzos, un Estado aristocrático del que sólo formaban parte los patricios.

- La conquista de los derechos ciudadanos por los plebeyos


Con el tiempo, los plebeyos fueron conquistando los derechos ciudadanos. Les fue reconocido, primero, el de organizarse como un pequeño Estado plebeyo, con unas asambleas llamadas comicios tributos, y unos magistrados que los defendían, los tribunos, los cuales tenían la facultad de ejercer el veto, o sea, de impedir la votación o aplicación de las leyes del Senado y de la Asamblea. Más tarde consiguieron que las leyes que hasta entonces guardaban en secreto los patricios, se hiciesen públicas y se escribiesen en un código: la Ley de las Doce Tablas. Finalmente, conquistaron el derecho a contraer matrimonio con individuos de la clase patricia y ocupar todas las magistraturas de la República.

Desde entonces, el Estado romano dejó de ser una república patricia, y el populus, o pueblo de ciudadanos, estuvo formado por toda la población libre.